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Teoría del Turbo-Marketing Turbo-Marketing, un Poco de Teoría Sobre la Práctica
Usted podrá decir "Miguel de Alzáa le pone 'turbo' a todo lo que se le cruza por el camino"... y es más o menos cierto... la palabra turbo me simpatiza porque refleja mi filosofía de funcionar a pleno, rápido y contundentemente. Pero qué es el turbo-marketing? un nuevo concepto? No, no es nuevo, es sólo sentido común aplicado. Y no, no es un concepto, al menos desde el punto de vista de que no es SÓLO un concepto. El turbo-marketing es hechos. Resultados. Si me permite ampliar un poco más, lo que ocurre normalmente en marketing es que alguien se toma el trabajo de analizar hechos exitosos, luego dice "esto significa...(tal cosa)", pone su conclusión dentro de una estructura de conocimientos ya existente -o crea una nueva- y de esa manera intenta explicar o transmitir a otros el nuevo descubrimiento o punto de vista. A ver si me estoy explicando bien... en marketing nadie inventa nada. O mejor dicho, los que inventan son los que actúan. Luego, los teóricos explican las acciones exitosas de los que actúan, encuadrando esas acciones dentro de determinadas categorías, creando cuadros sinópticos y dando conferencias, clases, escribiendo libros... Hasta aquí, todo bien y lógico. Yo no soy enemigo de las teorías. Me encantan las teorías. Disfruto debatiendo e intercambiando opiniones sobre teorías. Podría estar horas teorizando. Pero a la hora de los negocios... disfruto más con la práctica. ESA es la que produce resultados y la que a uno le da de comer. Bien, el hecho es que demasiado frecuentemente, el marketing al que yo denomino "académico" -con perdón de los académicos que no son así de académicos- se queda en la teoría. Partió de hechos, llegó a las teorías... y se durmió en los laureles. Y las discusiones se quedan en si esto es comunicación, promoción, marketing directo, en que si la venta directa es esto o lo otro... en que las cuatro Ps sirven o están pasadas de moda... en fin, charlas interesantes para compartir un cafecito, pero... señores (y señoras!) el movimiento se demuestra andando, lleguemos a donde queremos llegar. No importa si la calle se llama calzada o ruta o camino. O la vereda es acera. Entonces? Turbo-marketing? Sí. Un marketing con turbo-compresor: que multiplica los resultados de las acciones, aumenta las ventas, las ganancias, la imagen -la que sirve para algo en términos de nuestro objetivo. Es un marketing práctico... que proviene de una teoría bien elaborada en base a prácticas exitosas. Es no dormirse en los laureles y volver a aplicar. Ése debería ser el objetivo de cualquier teoría de marketing. Usted puede hacer turbo-marketing en su negocio. Todos podemos hacerlo. Porque básicamente, el turbo-marketing ES hacer. Pero más rápido, más eficientemente. Algunos me dicen que mi visión es demasiado táctica. Lo estratégico es generalmente más abarcativo y de más largo plazo. Por ejemplo, un boxeador decide, para ganar la pelea a un rival específico, usar un estilo defensivo -ésa es la estrategia. Luego, en determinado momento, el rival retrocede porque está afectado y nuestro boxeador pasa al ataque -ésa es una táctica. La táctica tiene más relación con la situación del momento. Sin reacción táctica, nuestro boxeador simplemente se quedaría parado, dándole lugar al otro para que se recupere, y perdería una gran oportunidad.
Volviendo al tema. ¿Es mi enfoque demasiado táctico? Yo no lo creo. El turbo-marketing es aplicar rápido lo que hace falta en el momento -táctica- dentro del marco de posición que asume la empresa -estrategia. Eeeeeh! pero la estrategia puede estar equivocada, o pasada de tiempo! -dirán algunos. O... Primero -dirán otros- hay que hacer un análisis estratégico de misión, visión, valores, competencias organizacionales requeridas, clientes y competidores... una matriz FODA -ya sabe, fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas- un mapa de posicionamiento, etc. etc. Eso es correcto. Pero si ya estamos en el baile, bailemos. Si alguien me está pegando con un palo no voy a detenerme a pensar si mi estrategia es conversar amigablemente, ser pacifista o ir a aprender karate. Simplemente decido, antes de que me muelan a palos, si me defiendo o salgo corriendo. Ojo. Esto no significa actuar a tontas y a locas. Quiere decir: evaluar rápidamente la situación, actuar... y a la vez, o después, en algún momento -que DEBE existir- darle tiempo a la estrategia. Porque tampoco es cuestión de comprar ropa de verano para darnos cuenta después, de que queremos ir a Ushuaia en invierno. Autor: Miguel Ángel de Alzáa, http://www.marketineros.com. Este artículo puede ser republicado siempre que se incluya este texto, incluyendo el link operativo.
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